Anualmente se realiza el CES (Consumer Electronics Show) en la ciudad de Las Vegas, estado de Nevada, Estados Unidos.
En este evento participan más de 4 mil compañías expositoras y se realizan más de 200 conferencias simultáneas. Se le considera como el encuentro tecnológico más grande a nivel mundial.
La robótica, inteligencia artificial, internet de las cosas y más
Lo que antes se plasmaba en películas de ciencia ficción o caricaturas se ha materializado en esta edición de CES: androides y robots con inteligencia artificial que enfocan sus acciones en la ayuda humanitaria.
Tal es el caso de Bot Care de Samsung que fue creado para cuidar la salud de su usuario.
El robot funciona al establecer contacto con la piel para medir la presión arterial, la respiración y hasta el ritmo cardíaco, además de resolver consultas a través de un sistema de voz.
Mientras Sony presentó a Lovot, un peluche con inteligencia artificial diseñada para detectar emociones de las personas, crear afectos y también colaborar en el hogar.
Asimismo se presentaron otras creaciones como exoesqueletos robóticos pensados para los empleados que realizan trabajos que requieren de mucha fuerza para levantar objetos pesados.
Los asistentes vivieron, de primera mano, la experiencia con un dron acuático como parte de las exhibiciones.
Se presentaron dispositivos móviles con tecnología “5G”, televisores enrollables marca LG; también se mostraron soluciones tecnológicas para el hogar con Google Assistant y Alexa de Amazon, sin olvidar las innovaciones en los automóviles de conducción autónoma.
El año de la asistencia virtual
La tendencia para el 2019 ha sido la asistencia al usuario, tanto para el cuidado de su salud, como su desplazamiento automatizado por las calles, la proyección de imágenes en superficies “enrollables”.
Google y Amazon exhibieron accesorios para carros, relojes y bocinas que pueden ser controladas por las asistentes virtuales a través de comandos de voz que pueden indicarle al usuario el pronóstico del clima, entre otras consultas más triviales, como los marcadores de algún evento deportivo en tiempo real.
Con este panorama no cabe duda que el CES se consolida como la vitrina más amplia para explorar las múltiples aplicaciones de la tecnología en el día a día.
Desde un punto de vista educativo, las creaciones del CES son una fuerte evidencia que el aprendizaje y una exitosa ejecución del método STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas) son rotundamente fundamentales para las demandas tecnológicas que deben suplir los profesionales hoy en día.
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